lunes, 27 de octubre de 2008

Purga

Hace unas noches tuve un sueño que parecía que lo hubiese rodado el David Cronenberg. No sé cómo ni por qué, me había nacido una vagina en una uña. La gente, lejos de compadecerme, me miraba con odio. Me decían que me estaba bien empleado, me acusaban de promiscua, de habérmelo buscado. La comunidad ciéntifica tampoco parecía mostrar mayor interés por el hecho, decían que eso no era más que un uñero, otros que una simple metástasis, otros insistían en mi presunta promiscuidad.
Fue el clero el que quiso tomar cartas en el asunto sugiriendo una manicura ablativa purgativa . Entonces desperté.

4 comentarios:

Remedios de los Dolores dijo...

Lo que yo me vengo preguntado es,

Si es relevante saber cuál sea la uña en la que surgió, como un espía del hielo, la vagina en cuestión.

Pues habiendo tantas uñas como hay, en torno a las diez, si no hay mermas ni excesos, sospecho ha de importar considerablemente, para abreviar las búsqueda, conocer el dedo preciso, sea de mano o de pie, que da cobijo a tan desubicado órgano.

Y no es que quiera yo participar del público escarnio, ni mucho menos deleitarme morbosa en la anómala disposición. Que sólo comparto mis inquietudes con la concurrencia, por ver si se prodigan, cual cizaña, y obtienen así, cumplida satisfacción.

Cat Ballou dijo...

Temo, querida amiga, que si le explico de qué dedo se trataba, concluya usted como todo el mundo, que tal mutación se deba a la más llana de las promiscuidades. De hecho, cuanto más lo pienso, más me doy cuenta del hecho de que durante una considerable parte de mi tiempo hay tal órgano en tal uña, sea dicho órgano propio o ajeno.
Tras semejante confesión y agradeciéndole su preocupación se despide suya y etcétera...

Remedios de los Dolores dijo...

Mucho me temo yo, por mi parte, que de lo último que se le pueda acusar a vuesa mercé sea de promiscuidad. Pues si esta significa primero "Mezcla y confusión" y luego "Convivencia con personas de distinto sexo" (según el DRAE), siendo suyo el dedo, no hay mezcla ni confusión, y si el dedo sigue siendo de su propiedad ¿dónde el sexo distinto? (¿Podemos presuponer sin equivocarnos que los dedos de cada uno son del mismo sexo de su propietario?).
Ahora lo que vengo dudando es qué surge de qué, si la vagina del dedo o viceversa y si de nuevo esto tiene importancia o el orden de los factores importa un bledo.
Confío en su sensatez para no responderme y evitar así posibles escabrosidades.
Un afectuoso (y algo afectado) saludo.

Cat Ballou dijo...

Nunca me hubiese imaginado que la RAE me iba a absolver de esta manera tan rotunda. No hay más que hablar.